Elegir los suelos ideales para la piscina no siempre es fácil, básicamente porque hay que encontrar el compromiso adecuado entre los aspectos prácticos y estéticos. De hecho, los suelos para la piscina, además de responder a su gusto personal, deben ser antideslizantes, resistentes a los cambios térmicos, duraderos y obviamente resistentes al agua. Hay muchas soluciones posibles, veamos cuáles.
Cómo elegir los suelos para la piscina
Hay muchos tipos de pisos para exteriores en el mercado , se diferencian en el costo, la calidad de los materiales y las características específicas. Analicemos algunos de los más utilizados para realizar el borde de la piscina y que garantizan calidad, resistencia y adherencia.
Suelos de resina para piscinas
La resina particular que se usa a menudo para la construcción del borde de la piscina se hace uniendo la resina con guijarros de mármol. De esta forma se obtiene un suelo drenante particular, resistente a la intemperie y antideslizante. Al ser un material muy popular, está disponible en muchas variaciones de colores y decoraciones, para integrarse perfectamente en cualquier contexto. Por último, el mantenimiento de los suelos de resina no es vinculante: la limpieza es rápida y sencilla con el uso de detergentes clásicos, sin precauciones especiales.
Pisos para piscinas en Decking o madera
La tarima exterior es un tipo de madera elegante pero particularmente exigente desde el punto de vista del mantenimiento. Generalmente se elige por su gran impacto estético y está disponible en muchas versiones (teca, iroko, ipè, fresno). El material se obtiene con un largo proceso de fabricación que garantiza su resistencia a la intemperie. Para mantener intactas sus cualidades, los suelos en cuestión deben tratarse con aceite en la superficie cada seis meses. Además, con el paso del tiempo, la madera tiende a cambiar de tono y hay que lijarla para devolverla a sus caracteres originales.
Por otro lado, la elección de la madera para la construcción de pisos externos le permite ahorrar en trabajos de cimentación y garantiza una colocación más rápida. También es un elemento que se integra bien con el entorno externo y armoniza fácilmente con los elementos naturales circundantes.
Una alternativa válida puede ser el parquet de bambú, muy similar a la tarima exterior e ideal para ser utilizado como pavimento junto a la piscina. De hecho, es un material extremadamente resistente a la intemperie y al agua.
Suelo de WPC
El WPC es probablemente el material más utilizado para pavimentos de piscinas debido a su alta resistencia al desgaste. Se obtiene mediante una combinación de madera pulverizada (que proviene de residuos de procesos industriales) y un polímero particular. De esta combinación se obtienen baldosas y lamas similares a la madera natural, que de hecho reproducen el efecto estético a menor precio. Las ventajas del WPC son muchas: es un material que no sufre la acción de hongos y líquenes, no se pudre en contacto con el agua, es económico, no presenta variaciones de color con el tiempo y no requiere ningún particular mantenimiento. Finalmente, al ser un material reciclable, es totalmente eco-sostenible.